Según la American Academy of Pediatrics, desde los 6 meses de edad, los niños empiezan a fijar la vista de cerca en dispositivos digitales. Así que como padres debemos ayudarles a cultivar hábitos de consumo digital que les permita mantener el bienestar de sus ojos y tener el tiempo que pasan frente a una pantalla bajo control.

Lo que podemos hacer:

1. Supervisa el tiempo de pantalla y establece un plan de consumo digital

Visita HealthyChildren.org/MediaUsePlan/es para crear un plan personalizado para el consumo digital que hace cada uno de tus hijos. Con esta herramienta online creada por la American Academy of Pediatrics (AAP) podrás tener acceso a una calculadora que te biranda una idea clara de cuánto tiempo pasa cada niño en sus actividades diarias, tales como dormir, comer, tareas, actividad física y tiempo de pantalla.

Lo interesante es que incluye recomendaciones para que en tu casa tengas zonas libres de pantalla, buenos modales en línea.

2. Cuida los ciclos de sueño

Diariamente, es vital pasar cierta cantidad de horas con los ojos cerrados, para evitar cansancio, resequedad y dolor. Según la AAP, lo ideal es que nuestros hijos no duerman con dispositivos digitales en sus habitaciones. Como te explicamos en uno de nuestros videos de YouTube, la luz azul que emiten las pantallas hace que sea más difícil conciliar el sueño. Así que celulares, tablets,  televisores, computadoras y demás dispositivos, deben quedar fuera.

Utiliza las herramientas de bienestar digital para conocer tus hábitos digitales y coloca límites para no excederte: Descarga la app de Google para Android o configura Screentime en Apple.

También es ideal evitar la exposición a pantallas durante 1 hora antes de irse a dormir.

3. Ayúdalos a mantener una rutina activa

Los expertos indican que desde los 6 años todos los niños deberían hacer al menos 60 minutos de actividad física diaria. Nosotros, además de intentar cumplir con esta recomendación, intentamos que nuestros hijos hagan actividades al aire libre para que conecten con la naturaleza, es sano que pasen tiempo expuestos a luz natural (siempre con protección solar).

4.  Los descansos deben ser frecuentes

A menudo los niños están tan absortos en lo que están haciendo que no notan los síntomas del cansancio ocular. Recuérdeles que deben tomar descansos. La American Optometric Association recomienda la regla 20/20/20:  aleje la vista de la pantalla cada 20 minutos y concéntrese en un objeto que esté por lo menos a 20 pies (6 metros) de distancia durante un mínimo de 20 segundos. Además, los niños deben alejarse de la pantalla por lo menos durante 10 minutos cada hora. Un temporizador (minutero) sencillo puede ayudar a su hijo a recordar e incluso hay programas de software que pueden ayudar al apagar la pantalla a intervalos periódicos.

5. Pestañear con más frecuencia

Según el The New England Journal of Medicine, mirar fijamente a una pantalla puede reducir a la mitad los índices de pestañeo y causar sequedad ocular.

Por ello, hay que alentar a nuestros hijos a intentar pestañear con más frecuencia, en especial cuando se toman un descanso sin pantalla. En caso de resequedad extra, consulta a un oftalmólogo para que te recomiende gotas humectantes o el uso de un humidificador de ambiente.

6. Posición de la pantalla

Se recomienda que la pantalla siempre esté levemente por debajo del nivel de los ojos. De la posición de la pantalla depende que nuestros ojos se resequen más o menos.

Actualmente, expertos sugieren que las pantallas de los dispositivos deben colocarse según la regla 1/2/10:

  • Los celulares debemos verlos a 1 pie (30,5 cm) de distancia
  • Las computadoras y laptops, a 2 pies (61 cm)
  • Los televisores a 10 pies (3 metros)

7. Énfasis en la iluminación

Para disminuir el resplandor y la fatiga ocular, se recomienda que el nivel de iluminación de una habitación, mientras usamos dispositivos con pantalla, debe ser más o menos la mitad de lo que sería para otras actividades como escribir o leer un libro físico.

En las noches, siempre reduce el brillo de la pantalla a un nivel más cómodo para la vista.

En caso de usar lentes, algunos optometristas recomiendan usar cristales con tratamiento especial que protege de las pantallas, y ayudan a reducir el resplandor. También se puede  agregar un revestimiento antirreflejo a los lentes.

Muchas personas también colocan protectores, cubiertas o filtros en las pantallas.

8. Cumplir con las citas de control con el oftalmólogo

En caso de visión borrosa, resequedad ocular o problemas de visión similares, es importante acudir a un profesional cuanto antes. Pero como los niños y adolescentes no siempre saben explicar qué les ocurre, es importante cumplir con sus exámenes de visión periódicos.

Fuente: HealthyChildren.org

9. Colocar un protector de luz azul a las pantallas o aplicar un tratamiento a los cristales de los lentes

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